Con el permiso de la presidencia,
Hoy nos convoca una causa que trasciende colores y partidos: Respaldar una reforma de gran relevancia para el futuro de México. Impulsada por nuestra primera presidenta, Claudia Sheinbaum, esta iniciativa no sólo busca asegurar la igualdad sustantiva en cada rincón del país, sino también fortalecer los derechos de las mujeres, garantizandoles una vida libre de violencia.
El dictamen que se nos presenta, plantea la modificación de diversos artículos de nuestra Constitución para avanzar en temas fundamentales como la paridad de género en la administración pública, la perspectiva de género en la procuración de justicia y la erradicación de la brecha salarial. No obstante, quiero hacer especial énfasis en un aspecto central de esta iniciativa: La paridad de género en los municipios.
La historia nos muestra que la participación de las mujeres en la política ha sido una lucha constante, una lucha librada en un terreno donde durante siglos se nos dijo que no teníamos lugar.
Las mujeres hemos tenido que superar barreras visibles e invisibles que nos han impedido acceder plenamente a espacios de decisión y liderazgo. Sin embargo, gracias a la perseverancia de quienes abrieron el camino, de aquellas que alzaron la voz y exigieron justicia, hemos alcanzado logros que hace solo unas décadas parecían imposibles.
Podría citar numerosos ejemplos, pero entre los más significativos está el hecho de que México cuente hoy con su primera Presidenta, un logro que cobra aún más importancia en el contexto de nuestra cultura, donde el machismo sigue siendo lastimosamente una realidad.
Nuestro país ha sido pionero en legislar sobre paridad de género y gracias a ello hemos visto avances importantes en el Congreso y en otros espacios de toma de decisiones. Aun así, estos logros no eliminan por completo los obstáculos, continúan persistiendo barreras que limitan una representación femenina auténtica, especialmente en el ámbito municipal, donde el machismo y las tradiciones patriarcales muchas veces restringen el acceso de las mujeres a posiciones de poder.
De acuerdo con datos de la ONU, México ocupa el quinto lugar mundial en participación femenina en parlamentos. En 16 de los 32 congresos estatales del país, el 50 por ciento o más de los legisladores son mujeres, un logro notable que merece reconocimiento.
A pesar de ello, el panorama cambia a nivel municipal. Datos del INEGI muestran que el 77 por ciento de las presidencias municipales son ocupadas por hombres, y solo el 23 por ciento, corresponde a mujeres. Esta disparidad se extiende a las comisiones edilicias, donde de las 29,699 comisiones instaladas en 2019, únicamente el 3.7 por ciento abordó temas de equidad de género o derechos de las mujeres.
Las mujeres han demostrado, una y otra vez, que son tan capaces y esenciales como los hombres, aportando ideas y liderazgo que transforman la sociedad. Nuestra presencia en la política contribuye a una democracia más completa, donde las decisiones reflejan realmente la diversidad de nuestra nación.
En la bancada del Partido Verde, tenemos el firme compromiso de construir un México donde la igualdad no solo sea un ideal, sino una realidad palpable. Por esta razón, acompañaremos este dictamen, convencidos de que los nombramientos en la administración pública, incluidos los gobiernos municipales, se realicen bajo el principio de paridad de género.
Por último, quiero expresar nuestro agradecimiento al Diputado presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales por haber incluido en este dictamen nuestra propuesta de crear fiscalías especializadas para atender delitos cometidos contra las mujeres en todas las entidades federativas.
Como grupo parlamentario, la seguridad y el bienestar de todas las mujeres son una prioridad. Queremos que cada mujer pueda vivir sin miedo, que nuestras voces sean escuchadas y valoradas, y que nunca seamos vistas como intrusas en ningún espacio.
Este dictamen responde a esa necesidad urgente, y estamos convencidos de que, con su aprobación, podremos construir un México donde las mujeres puedan desempeñarse de manera segura en cualquier ámbito, sin violencia y con pleno respeto a sus derechos.
Es cuanto.