Al presentar su propuesta ante el pleno, Nayeli Fernández indicó que este fondo ayudará a que los adultos mayores de 60 años vean una disminución en las primas de los seguros de gastos médicos, lo que aliviaría una carga económica considerable, siendo que un seguro de esta índole no dependa de la edad, sino del compromiso y la lealtad de quienes han aportado al sistema a lo largo de sus vidas.

El objetivo de esta iniciativa radica en integrar fondos especiales a través de fideicomisos privados irrevocables, para contar con recursos financieros complementarios que sean destinados, como medida de compensación y redistribución, al pago total o parcial de las primas correspondientes a los seguros contratados por personas físicas mayores de 60 años, en los cuales funjan como asegurados.

Se explica que la fuente de recursos para dicho fondo deberá provenir de un porcentaje del monto cobrado por concepto de primas en el ramo de salud, por parte de la Institución de Seguros correspondiente, el cual no podrá ser inferior al 3 por ciento.

Dentro de la iniciativa, también se incluye que en los costos de las primas para gente mayor a 60 años se tome en cuenta para su cálculo, la inflación general y no la inflación médica que llega ser hasta casi tres veces mayor, lo cual daría beneficios a este sector de la población.

“Aunque sigue siendo responsabilidad del Estado garantizar el acceso a servicios de salud, el sector privado puede desempeñar un papel complementario”, explicó la legisladora ecologista.

En el desarrollo de su propuesta, subrayó que los adultos mayores tienen mayores probabilidades de enfrentar problemas de salud que requieren atención médica y según datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros el costo medio por siniestro en el país es de aproximadamente 129 mil pesos, lo cual equivale a más de once meses de ingresos para los adultos mayores de 60 años.

De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, alrededor de 2.99 millones de personas en este sector de la población, carecen de acceso adecuado a servicios de salud. Esto preocupa ya que a medida que las personas envejecen, sus ingresos tienden a disminuir y sus probabilidades de sufrir enfermedades aumentan, encontrándose imposibilitados para pagar un seguro médico debido a su edad.

“La situación que enfrentan nuestros adultos mayores es un problema público que requiere nuestra atención y acción inmediata. Al abordar este desafío, no solo estamos protegiendo a un grupo vulnerable, sino que también estamos construyendo una sociedad más equitativa y solidaria”, señaló.