La reforma energética estableció un nuevo diseño institucional en donde se distingue la separación de las actividades en el sector energético y se establecen con claridad los mandatos y las atribuciones del propietario de los hidrocarburos, que es la Nación, de los operadores y por supuesto, de los órganos reguladores.
Con este nuevo diseño se busca que los organismos alcancen un mejor desempeño para lograr los objetivos de la política energética: seguridad de suministro, competitividad, sustentabilidad y viabilidad fiscal.
El objetivo, es que la Nación obtenga la mayor rentabilidad de en materia de exploración y extracción de hidrocarburos y, de un suministro continúo y eficacia, en materia eléctrica.
Se trata de facilitar la toma de decisiones para aumentar la capacidad y la velocidad de ejecución de proyectos y los índices de productividad, garantizando siempre una operación eficiente y transparente.
En esta Reforma, se entendió plenamente que la transformación hacia un mercado ampliamente competido requería de órganos reguladores institucionalmente fortalecidos, técnicamente especializados y socialmente legitimados, integrados por profesionistas cuya probidad y capacidad técnica esté acreditada en su trayectoria laboral y que es de conocimiento de todos.
En este sentido, el Partido Verde, la discusión sobre la integración de los órganos reguladores es para nosotros, por lo menos, esencialmente técnica.
La selección de los comisionados es de la mayor relevancia, en razón de que en el caso de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, tendrán como una de sus funciones más importantes salvaguarda el patrimonio de la Nación a través de la regulación en materia de exploración y extracción de hidrocarburos, con atribuciones tales como la prestación de asesorías técnicas a la Secretaría de Energía; la recopilación de información geológica, y la realización de las licitaciones, asignando a los ganadores y haciendo también la suscripción y administración de estos contratos.
Por su parte, la CRE deberá regular el transporte, almacenamiento, distribución y expendio al público de bioenergéticos, así como la generación de electricidad, los servicios públicos de transmisión y distribución eléctrica, la transmisión y distribución eléctrica que no forma parte del servicio público y la comercialización de electricidad.
Para ello, se les ha dotado de personalidad jurídica propia, autonomía técnica y de gestión, características que les va a permitir ejercer sus atribuciones de forma más eficiente, más eficaz y más transparente.
Sin embargo, lo que asegura la plena autonomía en la toma de decisiones reside en el mecanismo para el nombramiento de los comisionados.
El dictamen que hoy se pone a consideración del Pleno, cumple con lo que establece la Ley, tanto en el procedimiento como en los requisitos que se exigen para cada una de las personas que se han propuesto.
El Ejecutivo Federal, en tiempo y forma, presentó su propuesta de ternas para que este Senado determine los comisionados que deberán desempeñar tan importantes cargos en la Comisión Nacional de Hidrocarburos y en la Comisión Reguladora de Energía.
Los miembros de la Comisión de Energía han escuchado la visión de los comparecientes, han analizado su trayectoria y verificado que cuentan con una amplia trayectoria y conocimientos en esta materia.
Derivado de este análisis, la decisión se dio por unanimidad de quienes asistieron a esas sesiones de trabajo.
Los seleccionados mostraron ampliamente sus conocimientos; quedando documentado su experiencia y desempeño profesional.
En el Partido Verde, la decisión sobre los profesionales que integran los órganos reguladores debe darse en razón de sus conocimientos técnicos y su experiencia, de su independencia y de su autoridad moral.
Los ciudadanos que hoy se proponen, además de demostrar estos atributos, cuenta con una visión integral del sector energético y, con el respaldo que da la experiencia en la materia regulatoria, aseguran una implementación de la Reforma Energética acorde al nuevo modelo que aquí hemos votado.
Por tales razones, el Partido vota a favor de este dictamen y nuevamente vota a favor de México.
Es cuanto señor Presidente.
