Con su venia, señora Presidenta;

Vengo a esta tribuna para hablar a favor de una reforma de suma importancia porque transformará la vida de miles de jóvenes en nuestro país, al establecer en nuestra Constitución, como un derecho social, que el Estado otorgará un apoyo económico mensual a quienes se encuentren desempleados y no estén estudiando, con el propósito de que se capaciten y tengan mayores oportunidades de encontrar un empleo digno.

Esta modificación al texto constitucional refleja la convicción de quienes conformamos la Coalición Sigamos Haciendo Historia de que la transformación del país no está completa si se deja atrás a los jóvenes y no se hace lo necesario para ofrecerles una vida digna y un futuro más próspero.

En México, los jóvenes enfrentamos grandes desafíos para encontrar un empleo estable y bien remunerado, especialmente cuando concluimos nuestra preparación académica.

La tasa de desempleo juvenil en nuestro país es preocupante, lo cual provoca que muchos jóvenes queden atrapados en un ciclo de precariedad y falta de oportunidades. En este contexto, la Cuarta Transformación ha buscado cambiar la realidad de nuestra juventud, promoviendo políticas sociales que priorizan a los sectores más vulnerables, en este caso jóvenes que no se encuentran estudiando y no tienen un empleo, aquellos a quienes se insultaba al llamarles "ninis" y se les denigraba pensando que el no encontrar trabajo era su responsabilidad.

Para atender a este sector se creó el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, que hoy se pretende elevar a rango constitucional para asegurar su continuidad como un derecho social y como una política de Estado, sin importar el signo político de los gobiernos futuros. Destinar recursos suficientes a este programa será una obligación del Ejecutivo y del Congreso de la Unión cuando la reforma concluya su proceso legislativo.

Lo anterior es de la mayor trascendencia porque se debe señalar que en este sexenio se destinaron al programa Jóvenes construyendo el Futuro más de 115 mil millones de pesos un monto muy superior al que se había destinado en 30 años a programas y acciones con un propósito similar. Con la implementación de estos apoyos estamos reconociendo el valor de nuestros jóvenes y la necesidad de brindarles herramientas que les permitan salir adelante.

Los ingresos que obtienen los beneficiarios mientras siguen aprendiendo y ganando experiencia no solo ofrecen un alivio inmediato a su situación financiera, sino que también tienen un impacto positivo en diversas áreas.

Primero, al vincular estas becas a programas de formación, estamos fomentando el desarrollo de habilidades esenciales. Esto no solo prepara a los jóvenes para el mercado laboral, sino que también contribuye a construir un capital humano más robusto.

Además, esta reforma se alinea con los principios de la Cuarta Transformación, que busca cerrar la brecha de desigualdad entre los diferentes sectores sociales de nuestro país. Al proporcionar apoyo a los jóvenes en situación de vulnerabilidad, estamos creando un camino hacia la inclusión y la equidad.

Este es un esfuerzo necesario para que todos tengan la oportunidad de prosperar y enfrentar un mundo cada vez más competitivo. Y no podemos olvidar el impacto económico. Al apoyar a los jóvenes, también estamos beneficiando a la economía local, pues hay más dinero en el bolsillo de las personas y, por lo tanto, un mayor consumo.

Un joven que recibe un apoyo aumenta su capacidad de contribuir al desarrollo económico de su comunidad. Este ciclo de apoyo y desarrollo es fundamental para el avance de nuestra sociedad.

La Cuarta Transformación no se limita a atender las necesidades inmediatas; su visión es a largo plazo. Al invertir en nuestros jóvenes hoy, estamos sembrando las semillas para un futuro más próspero. Estos jóvenes, capacitados y empoderados, serán los líderes y trabajadores del mañana.

Al reducir el desempleo juvenil, contribuimos a la estabilidad social y a la construcción de una sociedad más justa. Un joven que encuentra una oportunidad para desarrollarse plenamente y desplegar al máximo sus capacidades es un joven que, a su vez, puede inspirar a otros e incluso emplearlos cuando apuestan por un emprendimiento.

Por todo lo que aquí he expuesto, en mi bancada votaremos a favor del dictamen.

Es cuanto, muchas gracias.