El día de hoy estamos discutiendo una reforma histórica para el pueblo de México, la lucha por los salarios dignos, no estamos hablando solo de números fríos o de cifras en una hoja de cálculo, estamos hablando de la vida de millones de mexicanas y mexicanos que día a día se levantan para construir este país con su esfuerzo, con su sudor, y que a pesar de ello aún muchos viven con enormes dificultades.
Durante décadas, los trabajadores fueron condenados a salarios que no alcanzaban a vivir con dignidad, cómo puede ser que el salario mínimo en México haya perdido más del 70 por ciento de su poder adquisitivo entre 1976 y 2016, esto no fue una simple coincidencia, esto fue el resultado de políticas que antepusieron los intereses de unos pocos por encima de la vida de millones de mexicanas y mexicanos, mientras otros se llenaban los bolsillos, condenaron al pueblo trabajador a la pobreza.
Hoy con esta reforma estamos diciendo basta, no podemos permitir que las maestras y maestros, esos héroes que educan a nuestros niños y jóvenes ganen 12 mil 500 pesos al mes, no podemos permitir que nuestros médicos, enfermeros, enfermeras, que cuidan nuestra salud y que arriesgaron su vida durante la pandemia ganen sueldos que van desde los cinco mil 700 pesos a los 12 mil pesos mensuales. ¿Es esto justo?, ¿es esto lo que realmente merecen? desde luego que no, por eso estamos aquí hoy, para defender una iniciativa que busca reformar el artículo 123 de nuestra Constitución.
No sólo se trata de una modificación legal, se trata de un acto de justicia histórico, se trata de una reforma que propone que los salarios mínimos nunca estén por debajo de la inflación, se trata de lo mínimo que cualquier trabajador en este país merece, que su salario no pierda valor frente al aumento de precios, queremos que el trabajo que es el motor de nuestro país se ha recompensado justamente queremos que quienes realizan funciones vitales para el Estado como las maestras, maestros, policías, médicos y el personal de enfermería reciban un salario digno, un salario que nunca esté por debajo del promedio registrado en el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Con esta reforma nos estamos asegurando que el trabajo sea verdaderamente digno en un país donde el 38 por ciento de los trabajadores gana un salario mínimo no podemos quedarnos de brazos cruzados, no podemos permitir que las desigualdades sigan creciendo, el trabajo no debe ser una condena, debe ser un derecho simplemente se trata de justicia, esto es lo que merecen nuestros trabajadores.
Hoy vamos a hacer historia, hoy vamos a demostrar que en México el trabajo, vale. Que la vida de cada trabajador importa, eso es una lucha por la dignidad y por la justicia social. Es una lucha por un país donde nadie tenga que elegir qué elegir entre comer o pagar la renta, un país donde el salario mínimo sea suficiente para vivir no solo para sobrevivir.
Compañeras y compañeros tenemos en nuestras manos el futuro de millones de trabajadoras y trabajadores y no les vamos a fallar porque cuando hablamos de salarios, no hablamos solo de economía, hablamos de derechos humanos, hablamos de justicia, hablamos del alma misma de nuestro país, por eso creo que el alma y corazón de los mexicanos late fuerte y está aquí en esta Cámara de Diputados porque saben que estamos discutiendo y construyendo desde la reformas del Presidente López Obrador, el Presidente que le devolvió la esperanza a los mexicanos, el Presidente que siempre luchó por la dignidad y soberanía de su pueblo, el Presidente que aumentó el salario de 88 a 248 pesos y en la frontera de dónde vengo a 374 pesos, el Presidente de la siguiente semana se habrá ido pero que nos dejará un gran legado para seguir haciendo historia.
El corazón de los mexicanos seguirá latiendo fuerte porque la siguiente semana llegará la primera mujer presidenta de México, la Doctora Claudia Sheinbaum Pardo, para continuar con ese legado, con esa esperanza y con la construcción del segundo piso de la Cuarta Transformación de la vida pública de México, como representantes del pueblo es nuestro deber responder a su mandato un mandato de justicia, de dignidad, sin titubeos, votemos a favor de esta reforma histórica, votemos a favor de los trabajadores de México.
Que viva la lucha por los salarios dignos, que viva el humanismo mexicano y que viva el pueblo de México.
Muchas gracias.