Buenas tardes, compañeras y compañeros diputados.
Todo individuo tiene derecho a la libertad y a la seguridad de su persona.
Artículo tercero de la Declaración Universal de los Derechos Humanos
Entre los esfuerzos implementados para afrontar la problemática de la violencia criminal en nuestro país destaca la creación de corporaciones policiales, predominantemente de carácter reactivo, las cuales buscaban combatir la creciente violencia y amenazas criminales en diversas regiones del país.
Un ejemplo emblemático es, la extinta Policía Federal, concebida con la misión de cumplir con la responsabilidad constitucional de prevenir y combatir el delito, sin embargo, ante el alarmante aumento de la capacidad operativa y armamentística de la delincuencia organizada se han tenido que llevar a cabo reformas estratégicas orientadas a fortalecer las acciones de seguridad reconociendo la necesidad de un enfoque integral y proactivo en la lucha contra el crimen, lamentablemente dichas modificaciones no lograron traer la paz que los mexicanos tanto anhelábamos, al contrario, los índices delictivos se fueron incrementando de manera alarmante con el paso del tiempo amenazando la vida, la libertad, la integridad y el patrimonio de la población.
Fue en ese contexto que, en 2006 se implementó una fallida política orientada a combatir el crimen organizado, caracterizada por un despliegue operativo a gran escala de las Fuerzas Armadas, así como de las corporaciones de seguridad pública federales, estatales y municipales, lo que resultó ser ineficaz ante la complejidad de la situación de violencia en nuestro país.
Lo anterior se tradujo en la presencia de miles de soldados en las calles, con la justificación de que la violencia criminal se había recrudecido en distintas zonas del territorio nacional, todo ello se dio sin la existencia de un marco legal encargado de delimitar el actor de las Fuerzas Armadas, lo que derivó en un saldo catastrófico de cientos de miles de víctimas.
Asimismo, en vez de fortalecer a las fuerzas policiales de Seguridad Pública se produjo su completa desintegración, no solo se ignoraron las jerarquías establecidas, sino que también se crearon vínculos de complicidad con ciertos grupos delincuenciales que se vieron favorecidos y apoyados por las estructuras policiales de ese entonces, en este contexto el gobierno del Presidente López Obrador asumió el compromiso de formular nuevos enfoques para la prevención de la violencia y el delito, los cuales están dirigidos a abordar las causas que han generado la crisis que hoy enfrenta el país en esta materia.
Se busca avanzar en una perspectiva que priorice el respeto a las libertades y los derechos humanos, garantizando que las estrategias de seguridad sean realmente efectivas para enfrentar a la delincuencia organizada, este fue el propósito con el que se creó la Guardia Nacional en el año 2019 y este mismo fin el que nos obliga a realizar cambios al texto constitucional el día de hoy que permiten dar continuidad a la operación de esta institución que se ha ganado la confianza de las y los mexicanos, por su labor en favor de la pacificación de nuestro país.
La finalidad de los cambios, propuestos por el Ejecutivo, es otorgarle a la Guardia Nacional las herramientas normativas necesarias para continuar su labor de proteger a las y los mexicanos. Debemos destacar la adscripción de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa con el único y claro, objetivo de establecer reglas claras para su funcionamiento como cuerpo policial con estricto apego a derecho como en muchas otras cuestiones de relevancia nacional, la oposición ha tergiversado la información en torno a este tema tan sensible y se ha dicho que esto representa militarizar al país, es falso, o que los elementos de la Guardia Nacional podrán hacer prácticamente lo que quieren, nuevamente mienten, y no habrá exterminio y por supuesto que nuestro país seguirá habiendo elecciones libres y democráticas, no engañemos.
Desde esta tribuna, negamos categóricamente que con esta reforma lo que se pretenda sea militarizar al país, por el contrario, desde su creación la Guardia Nacional se ha desempeñado con valor, profesionalismo, vocación de servicio e integridad, valores provenientes de la formación y disciplina militar de muchos de sus miembros.
Pero también ha quedado claro que su actuación durante estos cinco años ha sido acorde a la función para la cual fue creada, es decir, la de una institución policial, para hacer frente a esta situación se requiere una institución que cuente con un régimen especial de orden, formación, profesionalización y capacitación, la cual estará sometida a una regulación rigurosa para asegurar el respeto de los derechos.
Por ello, la doctora Claudia, Sheinbaum ha conformado un gabinete con gran experiencia en materia de lucha contra el crimen y de la mano con la reforma constitucional, que hoy votaremos, las funciones de la Guardia Nacional en la estrategia seguridad de nacional que implementará nuestra próxima Presidenta darán los resultados de tranquilidad y bienestar que tanto demanda a los ciudadanos.
Para la bancada del Partido Verde la seguridad nacional es fundamental y por ello votaremos a favor del presente dictamen.
Gracias. Muchas gracias por su atención.
Muchas gracias presidente.