Con la administración del ex presidente Felipe Calderón, la buena relación que China había mantenido con México desde hace 40 años ya no fue tan estrecha y se agudizó por la reunión que sostuvo el mandatario mexicano con el Dalai Lama (el líder del budismo tibetano) en 2011.
Zeng Gang, embajador de la República Popular de China en México, declaró lo anterior y afirmó que este encuentro afectó la relación bilateral entre ambos países, pero también impactó en la exportación de carne de cerdo de México a China, la cual prácticamente estaba aprobada y fue cancelada.
El diplomático ofreció una conferencia de prensa para dar a conocer la agenda de trabajo del presidente de la República Popular de China Xi Jinping, que llegará en una visita de Estado a nuestro país del 4 al 6 de junio del presente año y que es parte de una nueva era en las relaciones entre los dos países.
Recordó que tenía ocho años que un presidente de su país no venía a México y dijo que se busca que haya un tratado de libre comercio con esta nación. Actualmente China tiene firmado un TLC con Chile, Perú y Costa Rica.
Dijo que se negocia la firma de este acuerdo con Colombia y que China tiene gran interés de negociar con México por ser un importante país de comercio.
Zeng Gang recordó que durante la administración del presidente Calderón México enfrentó serios problemas de seguridad que afectaron a empresarios chinos que querían invertir aquí.
Sobre el impacto de la inseguridad que se vive en México a las empresas chinas, el embajador puso un ejemplo al recordar que una fábrica china asentada en Tamaulipas fue asaltada seis veces cuando iba a entregar sus productos al puerto de Manzanillo, lo que representó pérdidas por dos millones de dólares.
Lo mismo ocurrió, señaló, con algunas empresas automotrices que deseaban asentarse en México y ante la inseguridad decidieron no hacerlo.
El embajador de China confió en que con la nueva administración del presidente Enrique Peña Nieto las relaciones con México puedan ser más profundas, integrales y de una nueva altura.
Argumentó que la visita del presidente chino, con menos de tres meses al frente del gobierno, a México es una clara señal de la importancia que tiene la relación.
En la sesión de preguntas y respuestas, el embajador dijo que México tiene una economía bien desarrollada y aseguró que ambos países tienen muchas similitudes: ambos son miembros importantes de las naciones en vías en desarrollo y de las economías emergentes.
Opinó que México tiene importantes lecciones que dar de las que China puede aprender, por ejemplo, en el ámbito administrativo y económico.
Mencionó que la realización del sueño chino requiere un entorno internacional pacífico, y en ese punto México puede mantener estrechas coordinaciones, cooperaciones y apoyos con China en temas internacionales.
Zeng Gang mencionó que las economías de China y México tienen una gran complementariedad; en la actualidad, China es el segundo mayor socio comercial que tiene México en todo el mundo y el tercer mayor destino de exportación que tiene este país.
A la vez, México, agregó, es el segundo mayor socio comercial que tiene China en América Latina, lo que demuestra esta gran complementariedad.
El diplomático dijo que, según cifras de ProMéxico, el año pasado más del 80% de las exportaciones de China a México son productos intermedios, de bienes de capitales; “después de elaboración y montaje, los productos ya elaborados pueden exportarse a otros mercados, lo que le da más valor agregado y beneficia a México”, destacó.
“Si podemos firmar un TLC con México se va a reducir más el costo del comercio y se ampliará la cantidad de los productos, lo que beneficiará a ambos países”, consideró.
—¿Cómo se mantendría este equilibrio comercial para México?
—Ni exportando todo el tequila y la carne de cerdo mexicana a China se podría lograr un equilibrio comercial entre ambas naciones, pero un tratado de libre comercio favorecería a ello.
Con la firma de un TLC las empresas chinas vendrían más a México a invertir y también para producir productos que corresponden más a la necesidad del mercado chino, y los productos elaborados se pueden exportar a China para mantener el equilibrio.
Por otra parte, dijo, hay muchos productos que corresponden a la necesidad de China, por ejemplo, la carne de cerdo y res, los mariscos, productos pesqueros y frutas. Con la firma del TLC estos productos podrían entrar más fácilmente a ese mercado gigante, que cuenta con mil 300 millones de personas, y se estima que en los próximos cinco años China va a importar más de 10 billones de dólares de productos.
“Esperamos que los productos mexicanos puedan lograr un porcentaje importante de esta cifra”, subrayó.
Al detallar la agenda del trabajo del presidente de la República Popular de China a México, el embajador comentó que en esta visita de Estado vendrán en la comitiva oficial el consejero de Estado, el canciller, el ministro de Comercio Exterior, el presidente de la Comisión de Desarrollo y Reforma, el encargado de realizar las inversiones en el extranjero, el director de la Oficina de Grupo Dirigente de Economía y Finanzas del Partido Comunista de China.
Fuente: EL UNIVERSAL
