México, D.F., a  15 de diciembre de 2009

Boletín número 237/09

 FIJA PARTIDO VERDE SU POSTURA SOBRE LA REFORMA POLÍTICA ENVIADA POR EL EJECUTIVO FEDERAL AL CONGRESO DE LA UNIÓN

 El Partido Verde Ecologista de México fijó su postura con respecto a la reforma que en materia política envió al Congreso de la Unión el Ejecutivo Federal, y puntualizó que está a favor de la reducción del número de representantes en la Cámara de Diputados y en el Senado de la República, así como con las candidaturas independientes y de la reelección, bajo ciertos lineamientos.  Comentó que este instituto político apoyará la reducción del número de representantes en la Cámara de Diputados y en el Senado de la República siempre y cuando  su integración sea con 50 por ciento de mayoría relativa y 50 por ciento vía plurinominal, es decir que se refleje con la representación proporcional una representación porcentual pura de cada uno de los partidos que obtuvieron su registro en la última elección federal, de conformidad con las mejores prácticas de los Congresos Europeos.  Nuestra Constitución Política otorga en la actualidad una sobre representación del 8 por ciento en el número de curules al partido que obtiene la mayoría simple de los votos. Pese a que dicha cláusula es una herencia del pasado régimen autoritario, aún permanece en la ley sin justificación alguna.  En el mismo sentido señaló que es importante establecer con claridad que los candidatos independientes, resulten o no electos, deberán observar las mismas reglas de financiamiento, de competencia y una fiscalización más rígida. Agregó que en diversas ocasiones el Partido Verde se ha manifestado a favor de la reelección inmediata de legisladores, alcaldes y jefes de delegacionales, toda vez que dicho mecanismo puede contribuir a profesionalizar el trabajo político y a mejorar la rendición de cuentas de los servidores públicos electos.   Asimismo señaló que este instituto político está en contra de la segunda vuelta en la elección presidencial, ya que llevaría a la ingobernabilidad, crearía mayorías artificiales entre fuerzas minoritarias, que no necesariamente contribuirían a llevar adelante un plan de gobierno y sí, en cambio,  podrían ir en contra de la voluntad mayoritaria de los electores, expresada en la primera vuelta.  Agregó finalmente que la segunda vuelta debe valorarse sobre la base de la gobernabilidad y no solamente sobre la base de la legitimidad del candidato electo, debido a que incrementaría ampliamente el gasto en las campañas políticas.