La Ciudad de México sigue siendo uno de los principales centros de distribución de aves silvestres ilegales a nivel nacional, toda vez que las autoridades delegacionales no vigilan eficientemente el cumplimiento de la Ley de Protección a los Animales del DF.

En el marco del Día Internacional de las Aves Samuel Rodríguez Torres, líder del PVEM capitalino exhorta a las autoridades delegacionales para que sean más estrictas en el cumplimiento de la Ley eimpulsen entre la población, campañas de concientización para proteger a las aves y para desincentivar la compra venta de las especies silvestres o en riesgo de extinción.

A la vez recuerda a todos los ciudadanos, que la Ley nos obliga a denunciar ante las autoridades correspondientes, cualquier irregularidad en torno al manejo o venta de aves silvestres. El tráfico de especies animales es el tercer delito más importante del mundo, sólo superado por el tráfico de drogas y de armas.

Se estima que cada año se trafican ilegalmente entre 65,000 a 78,500 aves del tipo pericos o guacamayas. El 77% de los pericos capturados muere antes de llegar al consumidor final.

El Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Defenders of Wildlife de México y Teyeliz, afirman que cada año, 60 mil pericos de los 78 mil 500 capturados de manera ilegal, morían en el trayecto hacia las grandes ciudades, donde es más frecuente su comercialización.

Esto significa que por cada perico que la gente compra, cuatro mueren en el camino al mercado, lo cual es muy grave y pone en mayor riesgo de extinción a estas aves.

Para el PVEMDF la única manera de proteger a las aves silvestres es prohibir en definitiva su captura y compra venta en la Ciudad de México, pues la mejor forma de observarlas, es en libertad.