Doctor Salvador Vega y León, Rector General de la Universidad Autónoma Metropolitana,
Integrantes de la Junta Directiva,
Patronato, Comunidad Universitaria, invitados y personalidades que se encuentran presentes en esta Ceremonia Solemne, bienvenidos sean todos a este Recinto Legislativo.
El 19 de agosto del año 2009, esta Honorable Asamblea inscribió en Letras de Oro a esta noble Institución Académica, reconociendo la infatigable lucha que a lo largo de los años ha realizado, teniendo como únicas armas a las ideas, el diálogo y el debate plural.
En ese sentido, el Partido Verde siempre ha visto en la Universidad Autónoma Metropolitana, a una institución de alta calidad académica y de fuerte compromiso social con el país y el área metropolitana.
Asentada en los cuatro puntos cardinales de nuestra Ciudad, alberga en su lecho la creación y búsqueda permanente del conocimiento, la ciencia y el arte que han dado identidad e independencia al México contemporáneo.
Surgió con el acuerdo de distintos actores políticos y sociales que fueron sensibles a las aspiraciones profesionales de los jóvenes de nuestro país y fue producto de una visión que apostó por la educación como fuente de desarrollo social y humano para hacer de nuestro Estado, un ente más incluyente, equitativo y democrático.
Sus orígenes se enmarcan en el “Estudio sobre la Demanda de Educación de Nivel Medio Superior y Nivel Superior en el País y Propuestas para su Solución”, presentado por la ANUIES el 28 de mayo de 1973, cuando se sugiere la creación de una nueva universidad de carácter metropolitano que atienda a los cerca de 50 mil estudiantes que buscaban iniciar sus estudios universitarios.
El inusitado incremento en la demanda de educación media superior y superior, puso en el centro del debate si la capacidad del Instituto Politécnico Nacional y de la Universidad Nacional Autónoma de México, era suficiente para cubrir las solicitudes de ingreso.
De haberlo hecho, la excesiva población estudiantil con la que se hubieran topado ambas instituciones, habría derivado en una disminución en su calidad y excelencia académica o, en su defecto, en la concentración del servicio educativo tan sólo para unos cuantos.
En el diseño de la UAM figuran las aportaciones de Don Pablo González Casanova y del Doctor Guillermo Soberón, en lo que respecta al enfoque interdisciplinario con que esta institución se aproxima a los fenómenos sociales desde diversas disciplinas y campos.
La UAM organiza sus planes de estudio en una distribución curricular que parte de la comprensión y buen manejo de los conceptos, teorías, modelos analíticos y técnicas de investigación para culminar con el desarrollo de habilidades y competencias profesionales. Además, gracias a la diversidad de materias y horarios, da cabida a las necesidades de estudio de grupos históricamente excluidos por los métodos escolarizados.
Frente a las nuevas generaciones, esta sólida institución académica garantiza un futuro menos incierto y construye caminos tanto para la realización individual y colectiva como para la reafirmación de nuestras libertades y la vigencia de nuestros derechos.
Como fuente de movilidad social, la UAM simboliza un reclamo de unidad a la conciencia del país, pues incorpora constantemente a las clases menos favorecidas, convirtiéndolas en elementos angulares de nuestro desarrollo permanente.
Y por si todo ello fuera poco, la UAM es la institución con más profesores de tiempo completo. De los más de 3,400 académicos que laboran en ella, 87% lo hace en este rubro, lo que permite la positiva relación de catorce alumnos por maestro.
Noventa por ciento del total de docentes cuenta con estudios de posgrado, lo que ubica a la UAM 19 puntos arriba de la media nacional. El 45% se beneficia con el Programa de Mejoramiento del Profesorado de Educación Superior y, en los últimos años, incrementó en un 25% su participación en el Sistema Nacional de Investigadores, alcanzando cada vez más reconocimiento por la calidad y prestigio que realiza el 32% de sus académicos en investigación.
La UAM encabeza la lista de instituciones de educación superior tanto públicas como privadas de mayor calidad a nivel licenciatura; el 69% de sus 71 planes de estudio han sido calificados como de buena calidad, luego de haber sido acreditados bajo la normatividad que establecen los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior y el Consejo para la Acreditación de la Educación Superior. Esto beneficia a la población estudiantil tras un crecimiento del 37% en los últimos cinco años.
Finalmente, debo decir que esta gran institución, ha dado prueba de su autonomía e independencia de criterio. Arrogándose el derecho a disentir, ha propiciado el diálogo y la participación bajo un esquema público y creativo. Es, por lo tanto, la creadora y promotora de un espíritu abierto que abriga y analiza todas las posiciones filosóficas e ideológicas de nuestro tiempo y nuestra historia.
Su esencia radica, sin más, en lo que une a los hombres: la amplitud de un espíritu libre para alcanzar la soberanía humanística del pensamiento.
Universidad Autónoma Metropolitana:
Enhorabuena por estos primeros 40 años de vida, trabajo y expansión del conocimiento y nuestros mejores deseos y votos para que siga siendo una “Casa Abierta al Tiempo”.
ES CUANTO, DIPUTADO PRESIDENTE.
