El presidente Enrique Peña Nieto advirtió que México no se puede quedar a la zaga en la generación de energía limpia y barata, pues hoy los grandes inversionistas buscan en todo el mundo insumos más económicos para desplegar sus recursos.
Sostuvo que mediante la reforma energética, aprobada en diciembre pasado por el Congreso de la Unión, el país alcanzará el objetivo de generar más energía limpia y barata para los mexicanos antes de 2024.
Destacó que el Poder Legislativo estará trabajando en breve en la legislación secundaria en materia energética y recordó que esta reforma tiene entre sus objetivos asegurar que México tenga una mayor generación de energía.
El mandatario inauguró la Central Fotovoltaica Aura Solar I, que consta de celdas solares sobre un área de 100 hectáreas y que tuvo una inversión de 100 millones de dólares, con participación de inversionistas privados, Nacional Financiera y el Banco Mundial.
Acompañado por su esposa Angélica Rivera, el Presidente dijo que las grandes inversiones estarán buscando, en el mundo entero, dónde encontrar insumos más económicos, entre ellos uno de los más importantes: la energía.
Enfatizó que por eso es importante que el país “no vaya a la zaga en el resto del mundo; al contrario, México ha resuelto, de manera muy firme y con gran convicción, entrar en este proceso transformador del siglo 21”.
El mandatario puntualizó que hoy en todo el mundo no se da sólo un debate, sino una amplia competencia para generar inversiones productivas, detonar empleos y generar desarrollo a partir de ponderar qué fuentes de energía tienen menores costos.
Recordó que la Ley de Cambio Climático del país impone el objetivo, para 2024, de que 35% de la electricidad del país sea generada por fuentes limpias. Confió en que la meta se alcance antes de ese año.
El Presidente también inauguró, en Comondú, la presa Alberto Andrés Alvarado Arámburo, donde firmó un decreto para reglamentar la Cuenca Lerma-Chapala.
Y un segundo decreto para dar facilidades administrativas y regularizar los derechos de agua de 73 mil usuarios, entre ellos los de sistemas de riego, gobiernos municipales y estatales que tienen permiso vencido.
EL UNIVERSAL
