El Partido Verde del DF exhorta a los 16 jefes delegacionales a que practiquen inspecciones en tianguis, comercio en pequeño y transporte público para evitar que se siga violando los derechos infantiles con la explotación laboral, pues en todas las zonas de la Ciudad se violan los derechos de niños y niñas.

El secretario general del PVEMDF, Samuel Rodríguez Torres destacó la importancia de que las autoridades eviten la explotación infantil pues se vulnera el derecho de los menores a un bienestar físico, mental o moral, además su acceso a la educación y actividades de esparcimiento.

La organización Save the Children afirma que un 5 por ciento de niños que laboran indican haber sufrido un accidente, lesión o enfermedad relacionada con el trabajo, además de que un 27.2 por ciento labora en lugares con ruido excesivo y humedad, con herramientas peligrosas y productos químicos.

Casi todos los niños trabajadores llevan algo de dinero a su casa, pues en contrario sufren maltrato. El Artículo 123 constitucional y la Ley Federal del Trabajo lo prohíben estrictamente en menores de 14 años, pero estos ordenamientos son ignorados por los padres de familia y las autoridades laborales del DF.

El dirigente invitó a los jefes delegacionales para que a través de las áreas de Desarrollo Social, Educación o Desarrollo Económico, impulsen programas para frenar esa explotación infantil ya sea con becas o apoyos directos a las familias.

La Comisión de Derechos Humanos del DF advierte la necesidad de que las autoridades se involucren y elaboren diagnósticos de las causas y consecuencias del trabajo infantil en la Ciudad, impulsando políticas públicas de largo plazo para que no se afecte y discrimine a esos infantes.

El último censo poblacional reveló que 58.55 por ciento de la población mexicana de 14 años o más es económicamente activa, pero lamentablemente de esa cifra un 26 por ciento, no cuenta con la educación secundaria completa, lo cual les limita el acceso a trabajos de calidad y bien remunerados.

Todos conocemos causas que propician el trabajo infantil como la pobreza, la ignorancia, patrones culturales, violencia familiar y algunos empresarios sin escrúpulos que no respetan la Ley, sin embargo pocos intentan remediar la situación, concluyó.