México D.F., a 18 de abril de 2013

Sr. Procurador General de Justicia del Distrito Federal,

Lic. Rodolfo Fernando Ríos Garza:

Agradezco el honor que me da mi partido de poder dirigirme a usted con motivo del informe que hoy rinde.

La rendición de cuentas es el principal mecanismo de control sobre todo sistema de gobierno democrático, ya que permite alcanzar un equilibrio de poderes.

Sabemos que la Procuraduría asume retos de pendientes heredados; sin embargo, también estamos consientes de que no le son desconocidos, ya que usted fue colaborador de primera línea en la pasada administración.

Por lo tanto, de ninguna manera le son ajenos los temas torales en el Distrito Federal respecto la procuración de justicia. Aun así, nos encontramos en la expectación y estamos seguros de que asumirá la dirección de la Procuraduría con profesionalismo, honradez y visión de Estado.

Es del conocimiento de todos que le partido verde siempre a abanderado el tema medioambiental, pero también nos preocupan todos los temas que tienen que ver con el desarrollo social, político y económico, por lo que en esta ocasión y ante lo limitado del tiempo, quisiera referirme de manera particular al desarrollo urbano, a la trata de personas, al narcomenudeo y al secuestro.

En ese sentido, hemos de decirle Sr. Procurador, que no quitaremos el dedo en el renglón sobre el actuar de la Procuraduría a su cargo para que se haga justicia en contra de quienes violen la ley en dichos temas.

Y lo menciono porque en el Distrito Federal, en primer término, sufrimos de los cambios medioambientales que  vulneran la salud física y mental de todos los que habitamos la capital. Estamos expuestos recurrentemente a la contaminación del aire, del agua, y, en general, del medio ambiente que nosotros mismos hemos provocado.

Y lo hacemos porque no se aplica la ley y porque no se sanciona a los responsables.

Nos resulta preocupante que en el Distrito Federal sigan reproduciéndose vicios que implican la ocupación de áreas y reservas ecológicas protegidas. Por esta razón, nos resulta sumamente alarmante la expedición de permisos, licencias y violaciones constantes y permanentes al uso de suelo permitido, sin que haya sanciones ejemplares que contribuyan a inhibir dichas conductas.

Al respecto no podemos dejar de mencionar la gran labor que ha desempeñado el INVEA.

Igualmente en su informe da cuenta de la Fiscalía Desconcentrada de Investigación en Materia Ambiental y Protección Urbana, la cual a realizado 538 averiguaciones previas por invasiones, cambios de uso de suelo, tala de árboles y contaminación, pero los resultados no se perciben en la realidad, ya que aquí, en la Asamblea Legislativa, recibimos a diario el llamado general de ayuda para detener los atentados contra el suelo de conservación y las construcciones ilegales.

Ante ello, urge atender con mayor decisión este tipo de ilícitos, ya que de lo contrario, nuestra calidad de vida pronto será una falacia.

En lo que respecta al narcomenudeo, le solicitamos que se atienda no solo como un hecho punible, sino como un acto humano que daña el tejido social, afectando a las familias a través de la destrucción de la persona misma.

El combate al narcomenudeo en el ámbito local, resulta ser el primer bloque de contención a una de las principales causas de inseguridad. De ahí que la lucha debe ser frontal y permanente para evitar el fortalecimiento en la Capital, de células criminales que operan en distintos puntos del país.

En el Distrito Federal, el narcomenudeo se ha multiplicado de manera exponencial, pues se trata de un delito que se comete a través de bandas cuyos miembros cumplen con una clara división del trabajo. Asimismo, las bandas utilizan a menores de edad para evitar la cárcel, por lo que el año pasado creció en un 163% el número de detenidos por este concepto.

Igualmente,  el sistema de cuadrantes que opera en el DF, dividida en 865 microzonas, ha ayudado a la  conformación del Atlas de Incidencia Delictiva de la Ciudad de México, en el que se concentran datos útiles para el combate al crimen y que incluye información sobre 700 áreas de venta de drogas.

También, con el sistema de cuadrantes se ha tenido certeza de dónde se hallan los puntos de venta. Así es como la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal tiene plenamente identificadas las zonas de venta de drogas en la Ciudad de México.

De ahí nuestra preocupación porque toda esta información sea utilizada profesionalmente para combatir este látigo que azota sin piedad principalmente a nuestros jóvenes.

Otro tema que nos preocupa es la violencia por la condición de género.

Por esta razón el Partido Verde hace eco de los clamores de las mujeres que son violentadas por el sexo opuesto, agrediéndolas física, económica y psicológicamente, o bien, aquellas que bajo una nueva modalidad de la esclavitud, son sometidas a hacer de su cuerpo un objeto comercial, por sujetos que les obligan a prostituirse bajo distintas amenazas.

En tal virtud, en el entendido de que una sociedad se dignifica a sí misma solo cuando se vive en plena libertad, pugnamos desde mi bancada por una vida libre de violencia, donde las mujeres puedan diseñar y desarrollar plenamente su personalidad, sin la angustia y los agresivos límites que suelen imponer la opacidad, la deshumanización, la cobardía y la impunidad en la que viven los agresores.

Lamentablemente, el Distrito Federal ocupa el  primer lugar en materia de violencia comunitaria contra las mujeres, según el INEGI y, específicamente, la Zona de la Merced ha sido y es un espacio privilegiado para el comercio sexual.

En la  zona de la Merced, a toda hora del día se puede constatar la explotación de que son objeto mujeres, en muchos casos menores de edad, que ofrecen sus servicios sexuales; mujeres que en muchos casos son sustraídas para fines de explotación sexual y aún cuando el Gobierno de la Ciudad ha realizado acciones para combatir las redes de prostitución y trata de personas, éstas no han sido suficientes

Señor Procurador, es necesario que la dependencia a su cargo se avoque de forma permanente en la investigación de este delito que tanto daña a la sociedad y en particular a nuestras mujeres como grupo vulnerable, y que cuando acudan a requerir un servicio a la institución, cuente con personal sensible y capacitado para atender esta problemática y les otorgue la atención integral que corresponda.

En otro orden de ideas, a pesar de haberse reducido en lo general en un 13% los delitos cometidos en el Distrito Federal, el secuestro va en aumento en un 17.5%, ya que de 57 denuncias, aumentó a 67.

Al respecto, quiero dejar patente que el Partido Verde ha hecho y seguirá haciendo propuestas viables que contribuyan a combatir a la delincuencia, por lo que afirmo categóricamente que nunca obstruiremos el desempeño de la función pública con fines de protagonismo interés partidistas, sino al contrario Sr. Procurador, en nosotros encontrará siempre un aliado un amigo.

Y no quisiéramos dejar esta tribuna sin felicitarlo por la excelente labor que su administración viene realizando, a través de sus distintas agencias especializadas, particularmente en la atención a turistas nacionales y extranjeros, al igual que a todos los usuarios del Transporte Colectivo Metro, a los usuarios del Aeropuerto y especialmente lo felicito por la atención que se ha dado a las personas indígenas.

Sr. Procurador, agradecemos su presencia y reconocemos el respeto que usted muestra esta Asamblea representativa de los habitantes del Distrito Federal, por lo que reitero nuestro total apoyo a su persona al frente de la Procuraduría.

Es cuanto.