El Partido Verde Ecologista de México advirtió sobre la proliferación de distribución de carne en mal estado a nivel municipal, puesto que los rastros carecen de medidas de higiene y no se aplican los controles de sanidad correspondientes, poniendo en riesgo la salud pública, ya que puede provocar graves enfermedades gastrointestinales como: salmonelosis y cisticercosis.

 

El Dip. jesús sesma Suárez, integrante de la Comisión de Agricultura y Ganadería, en la H. Cámara de Diputados, demandó ejecutar las medidas loables para formular una estrategia nacional de sanidad de alimentos, con la finalidad de que se proteja la salud y se sostenga una producción de calidad, especialmente donde la actividad ganadera es la principal fuente de ingresos.

Por otra parte, destacó que en el 2006 se registraron un millón 452 mil 916 consultas por enfermedades infecciosas intestinales, y un millón 147 mil 657 por gastroenteritis y enfermedades diarreicas, en parte causadas por el consumo de carne en mal estado, según cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Sesma Suárez, también Secretario de Comunicación Social del CEN del Verde Ecologista, mencionó que en municipios de Durango, Puebla, Chihuahua y el Estado de México, entre muchos otros; el proceso de matanza, traslado, tratamiento y eliminación de desechos se realizan sin el adecuado control sanitario, que trae como consecuencias la afectación del medio ambiente y de la salud, especialmente la de los niños.

Finalmente, el Partido Verde por medio del Dip. Sesma Suárez exigió a la Secretaría de Salud, a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) y a los gobiernos de las entidades federativas la correcta aplicación del Reglamento de Control Sanitario de Productos y Servicios, y la obligación de realizar la inspección sanitaria de los rastros; de obtener su estudio de impacto ambiental por rastro; la verificación de la ubicación de estos, por lo menos a 2.5km de distancia de poblaciones, escuelas y hospitales; y que vigilen que realmente se cuente con la presencia de veterinarios, con el objetivo de que la carne se pueda vender al mercado, sin que amenace la salud pública.