Ante la prevalencia en el uso de fertilizantes nitrogenados sintéticos en el Distrito Federal, el diputado local pevemista, José Alberto Couttolenc Güemez presentó una iniciativa de reformas a la Ley Ambiental, a fin de prohibir este tipo de químicos, pues ocasionan daños irreversibles al suelo agrícola y a la salud de los capitalinos.

México D. F., a  23 de Agosto de 2010

Boletín número: 239/10

• Urge una regulación clara para productores, fabricantes e importadores: Couttolenc Güemez

Ante la prevalencia en el uso de fertilizantes nitrogenados sintéticos en el Distrito Federal, el diputado local pevemista, José Alberto Couttolenc Güemez presentó una iniciativa de reformas a la Ley Ambiental, a fin de prohibir este tipo de químicos, pues ocasionan daños irreversibles al suelo agrícola y a la salud de los capitalinos.Explicó que la infertilidad de los suelos en la Ciudad de México ocasiona que los agricultores busquen nuevas alternativas que les ayuden a contrarrestar los efectos del excesivo cultivo y la pérdida de suelo, ya sea por erosión, contaminación o por expansión de la mancha urbana.

Los productores capitalinos, dijo, en muchas ocasiones desconocen que los químicos que usan para adicionar nutrientes a sus cosechas, pueden dañar la salud de las personas y que provocan un desequilibrio ecológico, por lo que es urgente que el Gobierno capitalino implemente campañas de información sobre los fertilizantes que sí se pueden utilizar y en qué cantidades.

En ese sentido, el también presidente de la Comisión de Preservación del Medio Ambiente y Preservación Ecológica, indicó que los fertilizantes nitrogenados sintéticos provocan problemas de contaminación del agua por nitratos ya que son muy solubles, es decir al rociar estos químicos a las siembras se filtran fácilmente hacia los mantos acuíferos.

Según especialistas, los fertilizantes nitrogenados son nocivos para la salud ya que el nitrógeno se introduce a la sangre ya sea al consumir los vegetales directamente o al ingerir el agua contaminada. Esta afectación resulta al combinar el nitrógeno con la hemoglobina, pues reduce la capacidad de transporte de oxigeno, y en otros casos puede ocasionar la reproducción de células cancerígenas.

Asimismo, perjudica a la propia cosecha, pues al ser utilizado por largo tiempo las plantas de vuelven débiles y propensas a las plagas y enfermedades, subrayó.

Y es que, de acuerdo con la  Secretaría de Medio Ambiente en la capital del país, existen más de 28 mil hectáreas de suelo que es ocupado para uso agrícola, es decir esta actividad es realizada en la cuarta parte del total del territorio, principalmente en Milpa Alta, Tláhuac, Xochimilco, Magdalena Contreras y Tlalpan. Mientras que los principales cultivos son: maíz, nopal, jitomate, lechuga, acelga, espinaca, brócoli y hongos seta.

Por ello, señaló la necesidad de regular el uso de los abonos en la Ciudad de México, toda vez que es importante formar criterios legales que den sustento en el marco jurídico a nivel local, a fin de establecer reglas claras para los productores, fabricantes, importadores y la utilización general fertilizantes químicos, aseveró.

Recordó que en Estados Unidos las normas para el uso de fertilizantes son más estrictas porque les preocupa el daño ambiental y humano que pueden generar, en la capital del país no debe ocurrir lo contrario, la capital puede poner nuevamente el ejemplo para que a nivel federal se sientan comprometidos a resolver el problema.

Subrayó que no se puede permitir que los capitalinos utilicen productos de baja calidad y dañinos para la salud, es tiempo de terminar con esa situación.

PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO