Con la venia de la presidencia, compañeras y compañeros legisladores.
En nombre propio y de la fracción de mi Partido Verde Ecologista de México, hago uso de esta tribuna para presentar ante el pleno de esa soberanía la iniciativa con proyecto de reforma en virtud del cual se reforma y adiciona al tercer párrafo, del articulo 65 en su apartado "De las Comisiones", del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos.
Esta propuesta que reforma el Reglamento, pretende generar condiciones de igualdad en el desarrollo laboral de las y los diputados; compartir equitativamente la agenda legislativa, así como las trascendentes decisiones que se toman en cada uno de los órganos de gobierno del Poder Legislativo Federal.
Porque es la participación de las mujeres en los asuntos políticos y la igualdad en el acceso a los cargos públicos, derechos fundamentales reconocidos tanto en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, como en el Sistema Universal de Protección de estos derechos.
La relevancia de igualar las opciones del hombre y de la mujer en el disfrute y ejercicio de los derechos políticos ha sido establecida por la comunidad internacional, tal y como lo demuestran las normas de la Carta Democrática Interamericana, la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer, Convención de "Belém do Pará", la Convención para la Eliminación de Todas la Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), la Convención sobre los Derechos Políticos de la Mujer, los Objetivos del Desarrollo del Milenio, y otros ordenamientos internacionales.
La consolidación de la igualdad plena es uno de los principales ejes de la participación política de las mujeres en este plano legislativo. Su presencia en el Congreso Federal o Estatal, ejerce un efecto multiplicador, pues las mujeres en la vida pública se vuelven referentes para que otras mujeres decidan participar, ahora con la nueva ley electoral que nos permite la paridad de género en las candidaturas, lo que antes fue equidad, ahora es paridad, y hacia allá, camina la tendencia política universal en esta materia.
Es innegable que las mujeres hemos avanzado en los ámbitos social-político-laboral, sin embargo, todavía persiste falta de presencia en algunos de los espacios de toma de decisiones en la vida pública, debido en buena medida a la tardía inclusión y reconocimiento de sus derechos plenos, es desigual en comparación con la de los varones; lo anterior, contrasta con nuestra historia.
Antes del reconocimiento de sus derechos políticos, la mujer ha estado presente en la lucha por la defensa de diversas causas sociales.
Basta mencionar que tanto en el movimiento de Independencia, como en el de la Revolución, notables mujeres participaron hombro a hombro con distinguidos hombres para formar la Nación Mexicana, y marcada fue la exclusión que en el Constituyente de 1917, no hubo una sola legisladora.
Sin embargo, en un país como México, es necesario seguir transformando las políticas públicas en materia de perspectiva del género, en una transversalidad cultural, para edificar el empoderamiento de las mujeres a una mejor representación y su participación en los cargos de toma de decisiones; pues esto garantiza el fortalecimiento de nuestro sistema político más estable y mayor eficiencia legislativa.
Es importante tomar en cuenta, que la integración de estas Comisiones, en la praxis de las bancadas partidistas, la inclusión de las mujeres dependen en gran medida de la voluntad de los líderes y/o coordinadores, que comúnmente son varones, lo que las limita en su representación para presidir las comisiones y por tanto en la toma de decisiones.
Pues así como está integrada hoy en día esta Cámara, pese a que las legisladoras representamos un poco más del 40 por ciento de las curules, esa misma representación, no se ve reflejada en las comisiones legislativas.
Es indiscutible que en los últimos años, se ha logrado avances significativos, por lo que hoy, es el tiempo de actualizar a este cuerpo colegiado en materia de igualdad en sus órganos internos de gobierno.
Pues es impostergable, que siendo esta Cámara de Diputados el órgano promulgador de leyes en el país, hayamos pasado por alto, el compartir igualdad plena en el reconocimiento entre diputadas y diputados, pues el tener igualdad en las comisiones legislativas, nos pone en igualdad de circunstancias laborales, de representatividad política, de actividad en la agenda legislativa, y en todas las grandes decisiones que toma este País.
En este sentido, la presente iniciativa tiene como prioridad, el promover y fomentar la paridad de género legislativa, en los órganos de gobierno de la propia Cámara, promoviendo la integración representativa para el empoderamiento de las mujeres, en un plano de igualdad en la designación de las Comisiones Permanentes y ordinarias del Poder Legislativo Federal; en todas las comisiones, tanto ordinarias como extraordinarias.
Misma, que de ser aprobada esta enmienda deberán ser distribuidas en paridad, es decir en 50 y 50 de manera equitativa, usando para su distribución el mecanismo vigente, como lo establece el actual ordenamiento; es decir, en proporción, a la representatividad legislativa con que cuente cada fuerza política, representada en el Congreso.
Para lograr, el pleno ejercicio de los derechos que de las leyes emanan, reconociendo y garantizando paridad en todos los órganos de gobierno y toma de decisiones de este Poder legislativo.
Por cierto, quiero hacer un amplio reconocimiento a mi compañera diputada Guadalupe Murguía Gutiérrez, porque hoy, después de casi diez años de ausencia, una mujer preside esta Cámara de Diputados
Por su atención, muchas gracias.
Es cuanto.
PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO